Blade runner
Tras su paso por los festivales de Venecia y Sitges, los aficionados (aunque, tratándose de Blade Runner el objeto de nuestra afición, me temo que el término resulta demasiado pálido: más bien convendría decir obsesos, maniacos) aguardamos con impaciencia el lanzamiento comercial en DVD y demás formatos digitales de la obra maestra que Ridley Scott dirigiera hace ya 25 años, remasterizada y en una nueva versión que se nos asegura definitiva. No parece, sin embargo, que en esta nueva versión se hayan introducido cambios sustanciales respecto a la Director’s Cut en la que
descubríamos que Deckard (el protagonista encarnado por Harrison Ford) era en realidad un replicante. Siempre pensé que este ‘rasgo de autoría’ incorporado por Scott a su versión más personal de la película la empeoraba: resulta más desesperadamente hermoso que un Deckard humano se fugue con la replicante Rachel (Sean Young), sabiendo que es una máquina con fecha de caducidad, sabiendo que su amor es insensato y condenado a la desolación; desde el momento en que Deckard se convierte también en replicante, su amor por Rachel no deja de ser una razonable solidaridad entre congéneres. Una de las fascinaciones que nos procura Blade Runner es su condición de inagotable venero de interpretaciones; y, desde luego, en la preferencia por una u otra versión hay opiniones para todos los gustos. Con el lanzamiento de la versión definitiva de la película se nos anuncia también un documental de ¡tres horas y media!, titulado Dangerous Days, que a buen seguro no se bastará a dilucidar todas las especulaciones, curiosidades y comeduras de tarro que el aficionado (perdón, quiero decir obseso, maniaco) de Blade Runner rumia incansablemente, día tras día.
A quien esto firma, las más excitantes comeduras de tarro se las ha procurado el personaje de Roy Batty, el cabecilla de los replicantes rebeldes, interpretado por el actor holandés Rutger Hauer. Hay en ese personaje una aureola trágica, desaforadamente trágica, que lo entronca con Prometeo, aquel mortal que osó robar el fuego a los dioses, buscándose su perdición. Cada vez que Rutger Hauer aparece en la pantalla Read More